La cocina se rinde ante el papel del chocolate como transformador de la sociedad
El chocolate puede llegar a ser una excelente herramienta transformadora de la sociedad. Hasta tal punto lo está demostrando con gran pasión y esfuerzo la chef venezolana Maria Fernanda Di Giacobbe, que el mundo de la cocina se ha rendido a sus pies otorgándole el Basque Culinary World Prize, ambicioso nuevo premio, promovido por Basque Culinary Center, que busca distinguir a los cocineros que están impulsando iniciativas sociales.
El jurado que ha escogido a Di Giacobbe de entre otros 19 finalistas da la medida del prestigio que se le quiere dar al premio: Joan Roca, Ferran Adrià, Dominique Crenn, Heston Blumenthal, Massimo Bottura, Yoshihiro Narisawa, Enrique Olvera, Harold McGee, Massimo Montanari, Cristina Franchini y Laura Esquivel.
La venezolana, que abrió en 2004 la bombonería Kakao, ha impulsado distintos proyectos sociales en torno al chocolate. En 2009 creó el Proyecto Bombón, con talleres de bombonería en comunidades cacaoteras venezolanas que han permitido capacitarse a más de 8.000 personas. En 2013 llegó el turno del Proyecto Cacao de Origen, un centro que no solo investiga y lucha por preservar el chocolate venezolano, sino que también busca ser puente entre los productores, las universidades y los chocolateros del mundo.
No teniendo suficiente con ello, en 2014 arranca el Proyecto San Benito, con talleres y formación para las mujeres en situaciones desfavorecidas que han acabado formando parte de una plataforma de venta de bombones y pedidos especiales. Y por último, en 2015 se inicia el programa EPG en alianza con Chloé Doutre Roussel para capacitar a los trabajadores en torno al movimiento Bean to bar, mejorar procesos y perfiles sensoriales.