'La mona e mobile', las figuras balancín de Enric Monzonis | Pascua 2020 (X)
Índice especial creatividad pastelera en Pascua, temporada 2020
No podía faltar, no se lo quería perder, a pesar de las duras circunstancias actuales provocadas por la pandemia, el estado de alerta y el obligado confinamiento, Enric Monzonis ha sacado tiempo y recursos a mano para materializar una nueva colección de Pascua. Y lo ha vuelto a hacer, nos ha sorprendido con un diseño depurado, personal y evocador. Estas monas “balancín”, como él mismo las denomina, se basan precisamente en el mismo principio que aquellos, una base doble curvada que es la que permite el movimiento, eso sí, en este caso completamente elaboradas en chocolate.
Enric Monzonis ha desarrollado esta colección en esta caso utilizando principalmente la técnica del patronaje. A diferencia de los divertidos huevos tentetieso, que también gozaban de movimiento e interactividad, estas figuras están dibujadas y perfiladas antes de materializarse en chocolate. Tres propuestas, la gallina, la ballena y el cerdito, componen la colección, también acabada en tres colores diferentes, todos ellos debidamente pistoleados, quizá para conseguir un efecto rústico que las haga más sorprendentes y atractivas al mismo tiempo.
El técnico de Cacao Barry y profesor de la Chocolate Academy recuerda que la Pascua está pensada para los más pequeños, pero que también debe atraer a los adultos, por eso es un territorio adobado a la creatividad y que invita a explorar nuevos caminos. Y eso es justamente lo que Enric Monzonis se ha propuesto en esta ocasión. Él mismo nos lo muestra y nos lo explica.
Las monas balancín de Enric Monzonis from grupo vilbo on Vimeo.
“Un año más presento una línea de la cual me siento satisfecho porque quizá define mi estilo y me inspira confianza.
Considero que la materialización de la Pascua en forma de monas es para los niños, pero a su vez ha de atraer a los adultos, por tanto, si en la búsqueda de este objetivo podemos arriesgar e intentar crear proyectos sorprendentes para dar más valor al oficio y hacerlo crecer, mejor.
Todas las figuras se basan en un mismo principio, el balancín. Partiendo de una estructura compuesta de un exoesqueleto y añadiendo placas adicionales, he buscado la evocación de tres animales distintos, manteniéndome fiel a mi máxima “menos es mucho más”.
Pese a su delicadeza, dicha estructura me ha sorprendido con una muy buena compensación de fuerzas, permitiéndome añadir peso y lograr hacer funcionar el mecanismo.
La ejecución se ha realizado a través de la técnica del patronaje, un estilo que me hace sentir cómodo y que encuentro muy elegante y con muchísimas posibilidades.
Seguramente se trate de la evolución natural de una colección previa inspirada en este punto infantil de juego e interacción con la mona, pero esta vez, buscando un diseño y una ejecución algo más potentes.
Deseo que os guste.”
Enric Monzonis